14 noviembre 2008

MEZQUINA EXISTENCIA

A la madre
le supuraban
las venas.
El techo se venía abajo y a nadie parecía importarle.
Si total, los platos seguían sucios de la noche anterior, llenos de estofado que el pan no alcanzó a barrer.
Marisol
era la única,
que sentía llegar
la tormenta.
Sufría,
decía,
miraba,
se retorcía,
sudaba,
sentía,
tosía,
no se divertía,
vomitaba,
se despreciaba,
volvía,
pataleaba,
callaba,
inmóvil, se extiguía.

No hay comentarios.: